sábado, 10 de enero de 2015

AYUDA PARA EL COMENTARIO DE TEXTO DEL KHAN KUBLA, DE COLERIDGE

ESQUEMA DEL ANÁLISIS DEL CONTENIDO (pregunta 2.1)

1. Introducción: El fragmento seleccionado para el comentario pertenece al poema romántico titulado El Khan Kubla, escrito por Coleridge y publicado por primera vez en 1798.

2. Circunstancias en las que fue escrito: El poeta afirma que compuso este poema en sueños: antes de dormirse había tomado opio para calmar un fuerte dolor que sentía y se había distraído leyendo un libro sobre los viajes de Marco Polo, en el que se describía el palacio maravilloso de Xanadú mandado construir por el emperador mongol Khan Kubla. Este tipo de lecturas apunta al deseo de evasión a través del viaje imaginario a países exóticos propio del Romanticismo.
Al despertar a la mañana siguiente, Coleridge intentó poner por escrito los geniales versos que había soñado, pero recibió una inoportuna visita, que tuvo que atender, y parte del poema se le olvidó. Decidió cerrar la composición con la descripción de una visión de sí mismo como un poeta iluminado por la divinidad, que, sin embargo, no pudo terminar su obra perfecta.

3. Argumento del poema:
a) Primera parte (vv. 1-36). Estos versos oníricos describen un palacio admirable y luminoso, cuya construcción había sido decretada por el emperador Khan Kubla, quien se convierte aquí en el creador de una obra de arte maravillosa, puesto que el palacio aparece como una enorme cúpula (y el círculo es símbolo de perfección).    
Alrededor del palacio se extiende un jardín artificial, un locus amoenus sacro, surcado por arroyos y aromatizado por árboles de incienso, que se encuentra protegido por muros y torres. Este conjunto arquitectónico puede ser visto como una representación de la parte consciente de nuestra psique, de la perfección de nuestras creaciones racionales.
Sin embargo, dicho palacio está edificado sobre cavernas subterráneas, por las cuales transcurre un río sinuoso y sagrado, el río Alfeo (Amante de la ninfa Aretusa en la mitología griega. Rechazado por ella, la persigue por el Peloponeso y se adentra el el mar, sin mezclar sus aguas con él, hasta emerger en Siracusa, donde funde sus aguas con la ninfa simbolizada en una fuente). El poeta insiste en que este espacio subterráneo jamás ha sido "medido" por el hombre, esto es, se trata de un mundo inexplorado por el ser humano, lo que apunta a que pueda ser un símbolo de lo inconsciente y lo irracional de nuestra mente.
El río fluye a través de una naturaleza salvaje, incontrolada, sobrecogedora, en la que los impulsos sexuales se materializan mediante la unión lunar de la mujer con su "amante-demonio". No es posible mantener el caudal de Alfeo siempre bajo tierra, de modo que, en forma de fuente (en clara alusión a una eyaculación), sus aguas salen al exterior con tanta fuerza que las rocas saltan por los aires. El inconsciente se manifiesta, pues, en forma de sueños o de alucinaciones causadas por el opio. Los meandros del río se sumergen, de nuevo, en una caverna subterránea, produciendo un enorme estruendo, el cual parece profetizar el advenimiento de una guerra, de un conflicto interior destructor. Pero, a pesar de esta amenaza, se produce un milagro y emerge del caos un domo solar suspendido en el aire sobre profundas cuevas de hielo.

b) Segunda parte (vv. 37-54). Coleridge, en primera persona, se presenta a sí mismo presenciando el canto de una musa exótica, una doncella abisinia, que tañe el dulcémer para dedicarle una canción al monte Abora, en el que Milton situaba su Paraíso perdido. Esta musa trata de recordar al poeta la visión que tuvo en el sueño y que, tras la inoportuna visita, ha olvidado. Se convierte, pues, en un símbolo del artista romántico, inspirado por la divinidad y dominado por el sentimiento (la muchacha representa la parte femenina de su psique). Coleridge se lamenta de no haber podido recordar la composición onírica completa, pues de haberla escrito, habría sido reconocido por la sociedad como un genio creativo, de ojos relucientes y cabellera al viento, combinación del poeta en éxtasis y Apolo tañendo su lira, embriagado por la leche del Paraíso, que no es otra que el alimento del genio capaz de captar la inspiración divina.

En cuanto a la significación última del poema, los críticos no se ponen de acuerdo. Algunos lo ven como una síntesis del movimiento romántico en su vertiente fantástica o incluso satánica, en linea con otras obras de poetas como Lord Byron o Shelley. En todo caso, este poema onírico bucea en la irracionalidad de la mente humana, y puede ser considerado como un precursor de la teoría psicoanalítica de Freud y del movimiento vanguardista del Surrealismo.